La selección salvadoreña de fútbol empató 1-1 con la selección de Surinam, que al final de los 90 minutos fue abucheada por la afición salvadoreña, y con aplausos a los caribeños que ya estaban clasificados que de no ser así hubiesen complicado la clasificación de los nuestros a la siguiente fase de las eliminatorias del mundial de México, Estados Unidos y Canadá 2026.
El partido empezó con una dinámica del equipo local que poco a poco se fue disipando ante un equipo caribeño rápido de buen manejo de balón y que le gano el uno a uno al conjunto salvadoreño.
El volante ofensivo surinamés Justin Lonwijk anotó al minuto 18 del primer tiempo, que cayó como balde agua fría en la afición y rompió de inmediato la actitud ofensiva de la selecta cuscatleca. El gol del empate llegaría por conducto de Brayan Gil Hurtado al minuto 32 siempre del primer luego de una excelente triangulación.
En segundo tiempo El Salvador tomó un poco más la iniciativa y tuvo varias oportunidades frente al arco que no lograron terminar en gol. En muchos tramos del partido Surinam pareció conformarse con el empate puesto que ya estaba clasificado a la siguiente fase.
El técnico caribeño Stanley Menzo dijo sentirse muy satisfecho con el rendimiento de sus dirigidos pues empatar con El Salvador ubicado en la posición 88 del rankig de la FIFA es un sinónimo que como país han avanzado y esto es ganancia para ellos.
Ante la pregunta directa del cronista deportiva Gonzalo Cruz de Gol de KL en el sentido que no habrían leído bien planteamiento del equipo caribeño, el técnico de la selecta el colombiano Hernán Darío Gómez, reconoció que una “equivocada grande de nosotros de ir a presionar a un equipo europeo que juega a uno dos toques con gran velocidad, y nosotros dándoles espacio y estirándonos.
Esto dijo El Bolillo le obligó a replantear el partido y agruparse en la zona baja para contraatacar, estrategia que le dio resultado porque generaron varias oportunidades de gol.
“Aquí la gente me ha tratado muy bien, pero en la cancha no dijo sonriente el técnico colombiano, en alusión a la pobre actuación del equipo local que no termina de convencer a los aficionados que despidió a los nuestros con una silbatina y aplausos a Surinam que nunca nos ha ganado territorio salvadoreño en 56 años de eliminatorias mundialistas.